Con la intención de favorecer el crecimiento físico, emocional, intelectual y social de nuestro alumnado, el profesorado del Colegio Rural Agrupado (CRA) Ponte da Pedra comenzamos este curso 2014-2015 aplicando la Experiencia Piloto del programa de Educación Responsable. Os puedo asegurar que estos dos primeros trimestres fueron realmente "emocionantes" para todos. El profesorado responsable del proyecto percibía cómo los sentimientos, las emociones, las ideas, las habilidades iban surgiendo entre nuestro alumnado. Con esta sensación de bienestar, de haber hecho algo que realmente merecía la pena, acordamos extender estas buenas sensaciones al resto del alumnado del CRA, que por motivos de organización no había podido participar de los recursos.
Nuestro CRA está en Carballo, una población de alrededor de 31.000 habitantes muy cerca de A Coruña. Somos 7 escuelas y en nuestras aulas comparten espacio alumnos de infantil y primer ciclo de primaria. Con la idea de convivir, conocer a otros compañeros del CRA y disfrutar de las ventajas de la Experiencia Piloto del programa de Educación Responsable, decidimos dedicar el último día del segundo trimestre a "un día emocionante" y así lo hicimos, aunque la dispersión de nuestras escuelas no nos facilitase la tarea.
Pero entonces, ¿qué es un día emocionante?
Pues muy sencillo, os cuento nuestra experiencia:
Dividimos al alumnado por escuelas cuyas adscripciones son las mismas, y también según edades. Esta división facilitó la tarea y a la vez sirvió para cumplir otro de nuestros objetivos; establecer vínculos afectivos con niños y niñas que el año próximo se verán en su escuela de adscripción.
¡Por fin llegó el gran día! Muchos de ellos tuvieron que cambiar de escuela y no siempre fue fácil, incertidumbre, miedo, desconfianza? pero no hubo problemas, siempre encontraban alguna cara conocida, su profe, el profe especialista, sus compañeros? todo estaba diseñado para intentar pasar un día diferente lleno de sorpresas emocionantes.
Nos conocimos y presentamos mediante "abrazos musicales", ruedas de presentación, juego con globos, fue un momento lleno de alegría y muchas risas, sirvió para estar más receptivos. Después cada grupo se centró en una actividad del Banco de Herramientas, por un lado en las aulas de infantil "Me gusto" trabajando autoestima y autoafirmación y en las aulas de primaria "Zipi y Zape" habilidades de interacción. Como la emoción ya empezaba a restarnos energías, organizamos un taller de pinchos de frutas con chocolate, así trabajamos la expresión a través de los sentidos. Fue una experiencia multisensorial. También disfrutamos de un recreo donde ya las nuevas relaciones de amistad se palpaban. Para acabar la mañana realizamos el mural de las emociones que habíamos sentido e hicimos una evaluación de la jornada. En algunas escuelas modificamos las actividades y aprovechamos para grabar y disfrutar del coro de las emociones de primaria e infantil.
Procuramos abarcar todas las áreas que la Experiencia Piloto del programa de Educación Responsable considera más adecuadas para conseguir el objetivo de educación integral, expresión de emociones y fomento de la creatividad. El día resultó verdaderamente gratificante, las actividades motivadoras y positivas, y tanto alumnado como profesorado aprendimos algo nuevo. El alumnado vivió distintas emociones y el profesorado incorporamos algunos aspectos que no siempre forman parte de nuestro día a día.
Finalmente evaluamos esta actividad en el claustro, sumamos las opiniones de las familias, escuchamos a nuestros alumnos y obtuvimos una valoración muy positiva. Esto nos hace pensar que estamos en el camino acertado y que podríamos extender esta experiencia a nuestra práctica diaria y no reducirlo a un solo día.
¡Queremos aulas emocionantes!
Beatriz Castro Suárez
Profesora del CRA Ponte da Pedra (A coruña, Galicia)