jun 14, 2023
Fundación Botín
Todos podemos aprender técnicas que permitan canalizar nuestra ira de forma respetuosa con nosotros mismos y con el entorno.
A continuación aparecen algunas ideas que pueden llevarse a cabo en el aula. Una parte de las actividades se basan en la liberación emocional y otras se centran en la disminución de la ira.
Así mismo, se han tenido en cuenta los tres componentes de la emoción: fisiológico (sensación de calor, sudoración, aumento de la frecuencia cardíaca, tensión muscular…), conductual (apretar los puños, golpear, insultar…) y cognitivo (pensamientos calientes).
Historia de la tortuga
Entrenamiento en relajación muscular